Reciclar o Morir. La suerte del planeta está en tus manos.

Reciclar o Morir. Este es el dilema.

En ecología un sistema es sostenible cuando la explotación de los recursos está por debajo de la producción natural de los mismos.
Según La Organización de las Naciones Unidas cada año se producen más de 400 millones de toneladas de plástico en el mundo. Plástico que en algún momento generará basura. De los desperdicios producidos por el plástico sólo un 10 % son reciclados, el 12 % se incinera, el 78% restante es lanzado al medioambiente y parte irá a parar al mar.
La incineración puede ser una solución pero por el momento presenta un montón de problemas y no disminuye la cantidad de materia prima necesaria.
Si la tasa de reciclaje es baja tenemos una sobreexplotación de recursos que está poniendo en peligro el equilibrio ecológico del planeta y las Reciclar o Morirgeneraciones futuras se encontrarán con una Tierra desolada.

La solución pasa por reciclar

Como la solución de crecer menos parece que está descartada ya que choca contra los intereses de los poderes económicos que son los que rigen el mundo, sólo queda una vía de escape: Reciclar, Reciclar y Reciclar.

Dentro de unas cuantas decenas de años tendremos un planeta (tierras y océanos) cubierto por una capa de plástico y un sistema ecológico alterado poniendo en peligro la supervivencia de una gran cantidad de especies.

Hay que invertir mucho más en la investigación del tratamiento del reciclado. La ecología del planeta (y la Humanidad) está en peligro.

¿Tan difícil es verlo?          Reciclar o Morir.

Sbags, desde su modesta posición, contribuye en lo posible a la solución del problema fabricando bolsas de tela TST. Bolsas de tela con materiales 100% reciclables y reutilizables.

Si todo el mundo tuviera conciencia de lo que está en juego, el problema continuaría existiendo, pero la solución sería posible. Hay que forzar a crear leyes que protejan la sostenibilidad del planeta y hacer que se cumplan.