Incompatibilismo Compatibilismo y Control Intervencionista
Los compatibilistas afirman que la toma de decisiones consta de 4 módulos (o algoritmos) cerebrales:
Sobre los que podemos actuar y ello representa nuestra libertad y responsabilidad, por lo que el castigo es justificable.
Para los incompatibilistas la configuración de los módulos fija la selección de la alternativa y parece injusto el castigo.
El Control Intervencionista justifica la libertad en la toma de decisiones, por la intervención del Yo espiritual.
Compatibilismo vs Incompatibilismo
El compatibilista puede considerar que si se tuviera más información podríamos haber actuado de otra forma (ser libres) y por tanto somos responsables siempre que tengamos la posibilidad de acceder o conocer esta información, que nos lleve a considerar nuevas alternativas.
Pero, si mis módulos están mal configurados en el pasado, es posible que tenga responsabilidad en el futuro, pero no en el pasado. Si mis módulos se desconfiguran por accidente, enfermedad o manipulación ¿somos responsables de nuestra actuación?
Al compatibilista solo le importa lo que hemos hecho no como hemos llegado a decidir.
Adicionalmente, puede que en una situación determinada sea el Yo primitivo (o animal) el que evalúe y seleccione la alternativa, por lo que actuaremos de forma instintiva. Mientras que si es el Yo autobiográfico el que selecciona las alternativas, tendrá en consideración nuestras experiencias anteriores. Si interviene el Yo experimentador, no tendrá en cuenta nuestro pasado. Los incompatibilistas consideran que la configuración cerebral determina el Yo que actúa.
Blackburn – Kant
Según Blackburn la estructura conceptual compatibilista parece adecuada.
Immanuel Kant estaba contra el compatibilismo, ya que consideraba que eludía el problema en lugar de solucionarlo.
¿Algoritmos o Personas?
Incompatibilismo Compatibilismo y Control Intervencionista
El compatibilismo describe los seres humanos como módulos (algoritmos) de decisión. Pero nosotros no nos contemplamos así, no somos víctimas pasivas, sino sujetos activos. Y deseamos que los demás nos vean así.
Según Peter Strawson tratamos a los demás como obstáculos que debemos comprender, gestionar y controlar. Deberíamos tratar a la gente como personas humanas y no como objetos de análisis.
La dignidad humana
A menudo se pretende que el dualismo (control intervencionista del Yo espiritual) es lo único que hace posible la libertad y la dignidad humana.
Si no estamos de acuerdo con el dualismo, ¿somos máquinas controladas por genes egoístas? Como nos dice Richard Dawkins en “El gen egoísta”.
En efecto la genética es responsable de los módulos de decisión, pero como van a funcionar, ya es otra cosa, la capacidad de percibir, generar alternativas, evaluarlas y ejecutarlas, es altamente flexible.
La genética es esclava y egoísta, la cultura es altruista y libre.
Referencias
“Pensar” de Simon Blackburn
“La conciencia” de Nick Lane
“El poder del ahora” de Eckhart Tolle
“Homo Deus” de Yuval Noah Harari
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